De sobra son conocidas las mañas del general corso en el campo de batalla: gran estratega hasta que se topó con el Duque de Wellington , había cosechado sin embargo a lo largo de una dilatada trayectoria bélica, muchos sinsabores ( los laureles postraron a toda una poderosa Europa). Como la perdición de divisiones enteras que después de tomar Moscú , se batieron en una retirada que el General Invierno y el desorden de las tropas, convirtieron en un reguero de muertes. Nadie entendió el caos que prendió en las filas del gran ejército francés; la murria que acogota a las masas cuando luchan desesperadamente contra la grandes dimensiones inasibles de la naturaleza rusa, quedaron fielmente reflejadas en la magistral Guerra y paz de Tolstoi . Sin quererlo fueron un precedente de las tropas nazis, que no escarmentaron a pesar de la tozudez de la historia, que nos desvela muchas enseñanzas conservadas en formol, pero audibles para quien las quiera escuchar, pese a que sus reverberos se ...
Un viaje por la historia y la cultura